El apego afectivo o la dependencia emocional dentro de la pareja es un tipo de adicción que, con el tiempo, puede generar sufrimiento. Son muchas las personas que padecen este sufrimiento y se encuentran bloqueadas ante la mera posibilidad del abandono o la soledad.
En el amor hay un deseo de compartir, acompañar, disfrutar de la presencia del otro y en el apego se genera un sufrimiento por no poder poseer de forma total al objeto del aprecio.
En la dependencia, la necesidad es tan grande que se pierde la voluntad. Ya no se trata de querer, sino de necesitar a esa persona. En cambio, en el amor sí hay voluntad, por eso podemos darnos cuenta e identificar signos de alarma o hablar de aquello que no nos gusta sin miedo y con total libertad.
¿Cómo saber si tengo apego a mi pareja?
Tengo:
- una visión idealizada de tu pareja o de la relación.
- la creencia de que tu vida carece de sentido sin tu pareja.
- la creencia de que no puedes encontrar felicidad o seguridad solo.
- un miedo persistente al rechazo.
- una necesidad constante de seguridad.
- Sentimientos de vacío y soledad al pasar tiempo a solas.
- Necesitar a tu pareja para construir tu autoestima y confianza.
- Sentimientos de celos o posesividad.
- Desconfianza de lo que siente tu pareja por vos.
Si concluiste que tu relación tiene más de apego de necesidad que de amor, es importante que lo trabajes sólo y con tu pareja.
- Construí objetivos propios, metas tuyas que quieras conseguir a nivel personal.
- Cultivá una vida social más allá de tu pareja, con amigos, familiares, compañeros de trabajo…
- Aprendé a disfrutar tiempo solo haciendo algo que te guste y disfrutes, buscá esa actividad…
- Desarrollá la asertividad, esto es, decir las cosas que necesitas, que te gustan, como las que no te hacen bien o no te gustan pero una manera adecuada que no hiera a tu pareja sino que les haga bien a ambos.
- Trabajá sobre tu desarrollo personal potenciando tu profesión, haciendo actividad física, espacios de relax meditando, dando un paseo por la naturaleza, escuchando música, leyendo o escuchando un podcast, etc. Nutrite personalmente.
- Apoyate con Profesionales que te ayuden a revisar y a aprender recursos que potencien tu persona y tus vínculos.